Según cuenta Fey Pirzio Bíroli, Idana “la Contessina” -como solía llamarla Nonino-, solía pasar tardes de verano enteras con Pina en “la terracita” de la casa de Nonino.

“... La señora de Nonino, Pina, que siempre había sido la modista y sastre de la familia fue gran amiga y confidente de mi madre. Esto se debía no sólo a su aguda inteligencia y sabiduría, también a su sentido de lo espiritual que concordaba con el de su patrona.
Nonino y Pina habitaban en una casa de la propiedad, y Pina trabajaba en su propia casa o en la nuestra.
Mi madre pasaba mucho tiempo en su casa atravesando el jardín....”
- Fragmento del libro de Detalmo Pirzio Bíroli “Finestre e Finestrelle” 2005 Campanotto Editore, Italia.

Al morir Idanna en 1940 pidió expresamente que cuando a Pina le tocara su hora, fueran enterradas una al lado de la otra. Y allí está. Al lado de su amiga. En la tumba de Pina hay labrada una frase escrita por Idanna Savorgnan de Brazzá